lunes, 11 de febrero de 2013

Teoría de Kübler Ross del duelo y la muerte

Describe, en cinco etapas distintas, un proceso por el cual la gente lidia con la tragedia, especialmente cuando es diagnosticada con una enfermedad terminal o una pérdida catastrófica.

  1. Negación
    «Me siento bien», «esto no me puede estar pasando, no a mí».
    La negación es solamente una defensa temporal para el individuo. Este sentimiento es generalmente reemplazado con una sensibilidad aumentada de las situaciones e individuos que son dejados atrás después de la muerte.
  2. Ira
    «¿Por qué a mí? ¡No es justo!», «¿cómo me puede estar pasando esto a mí?».
    Una vez en la segunda etapa, el individuo reconoce que la negación no puede continuar. Debido a la ira, esta persona es difícil de ser cuidada debido a sus sentimientos de ira y envidia. Cualquier individuo que simboliza vida o energía es sujeto a ser proyectado resentimiento y envidia.
  3. Negociación
    «Dios, déjame vivir al menos para ver a mis hijos graduarse», «haré cualquier cosa por un par de años más»,
    La tercer etapa involucra la esperanza de que el individuo puede de alguna manera posponer o retrasar la muerte. Usualmente, la negociación por una vida extendida es realizada con un poder superior a cambio de una forma de vida reformada. Psicológicamente, la persona esta diciendo: «Entiendo que voy a morir, pero si solamente pudiera tener más tiempo...».
  4. Depresión
    «Estoy tan triste, ¿por qué hacer algo?»; «voy a morir, ¿qué sentido tiene?»; «extraño a mis seres queridos, ¿por qué seguir?»
    Durante la cuarta etapa, la persona que está muriendo empieza a entender la seguridad de la muerte. Debido a esto, el individuo puede volverse silencioso, rechazar visitas y pasar mucho tiempo llorando y lamentándose. Este proceso permite a la persona moribunda desconectarse de todo sentimiento de amor y cariño. No es recomendable intentar alegrar a una persona que está en esta etapa. Es un momento importante que debe ser procesado.
  5. Aceptación
    «Esto tiene que pasar, no hay solución, no puedo luchar contra la realidad, debería prepararme para esto».
    La etapa final llega con la paz y la comprensión de que la muerte esta acercándose. Generalmente, la persona en esta etapa quiere ser dejada sola. Además, los sentimientos y el dolor físico pueden desaparecer. Esta etapa también ha sido descrita como el fin de la lucha contra la muerte.
Kübler-Ross originalmente aplicó estas etapas a las personas que sufren enfermedades terminales, y luego a cualquier pérdida catastrófica (empleo, ingresos, libertad). Esto puede incluir eventos significativos en la vida tales como la muerte de un ser querido, divorcio, drogodependencia, un diagnóstico de infertilidad, etc.
Kübler-Ross afirmó que estas etapas no necesariamente suceden en el orden descrito arriba, ni todas estas son experimentadas por todos los pacientes, aunque afirmó que una persona al menos sufrirá dos de estas etapas. A menudo, las personas atravesarán varias de estas etapas en un efecto «montaña rusa», pasando entre dos o más etapas, y volviendo a hacerlo una o varias veces antes de finalizar.
Las personas que estén atravesando estas etapas no deben forzar el proceso. El proceso de duelo es altamente personal y no debe ser acelerado, ni alargado, por motivos de opinión de un individuo. Uno debe ser meramente consciente de que las etapas van a ser dejadas atrás y que el estado final de aceptación va a llegar.
Sin embargo, hay individuos que luchan con la muerte hasta el final. Algunos psicólogos creen que cuanto más luche una persona ante la muerte, más tiempo permanecerá en la etapa de negación. Si este es el caso, es posible que la persona enferma tenga más dificultades para tener una muerte digna. Otros psicólogos afirman que no confrontar la muerte hasta el final es una adaptación para algunas personas. Aquellos que experimentan problemas lidiando con las distintas etapas, deben considerar grupos de ayuda o tratamiento profesional de duelo.

Tabla de teorías de Freud y Kohlberg


Desarrollo físico y desarrollo psicológico


ETAPAS DEL DESARROLLO MORAL SEGÚN L. KOHLBERG


NIVEL 1. PRECONVENCIONAL
Los actos son “buenos” o “malos” para el niño en base a sus consecuencias 
materiales o las recompensas o castigos que le reportan.
El niño es receptivo a las normas culturales y a las etiquetas de bueno y malo, 
justo o injusto, pero interpreta estas etiquetas en función bien sea de las consecuencias 
físicas o hedonistas de la acción (castigo, recompensa, intercambio de favores) o en 
función del poder físico de aquellos que emiten las normas y las etiquetas. El nivel se 
divide en los dos estadios siguientes:
Estadio 1. La mente del niño “juzga” en base a los castigos y la obediencia.
Las consecuencias físicas de la acción determinan su bondad o maldad, con 
independencia del significado o valor de tales consecuencias. La evitación del castigo y 
la deferencia incuestionable hacia el poder se valoran por sí mismas y no en función del 
respeto a un orden moral subyacente apoyado en el castigo y en la autoridad.
Estadio  2.  Está  bien  aquello  que  reporta  beneficios  y  satisface  necesidades, 
eventualmente las de los otros. Aparecen las nociones de “lo correcto”, “lo equitativo” 
pero se aplican en el plano material. La reciprocidad consiste en “tanto me das, tanto te 
doy”.
La acción justa es la que satisface instrumentalmente las necesidades del yo y, 
ocasionalmente las de los otros. Las relaciones humanas se consideran de un modo 
similar a las propias del mercado. Se encuentran presentes elementos de honestidad, 
reciprocidad y de participación igual, pero se interpretan siempre desde un modo físicopragmático. La reciprocidad es un asunto de “tú me rascas la espalda y yo te rasco la 
tuya”, no de lealtad, gratitud o justicia.
NIVEL 2. CONVENCIONAL
La actitud global de la persona es de conformidad a las expectativas y al orden 
social.
En este nivel,  se considera  que el  mantenimiento  de las expectativas  de la 
familia, el grupo o la nación del individuo es algo valioso en sí mismo. La actitud no es 
solamente de conformidad con las expectativas personales y el orden social, sino de 
lealtad  hacia  él,  de  mantenimiento,  apoyo  y  justificación  activos  del  orden  y  de 
identificación con las personas o el grupo que en él participan. En este nivel hay los 
estadios siguientes:
Estadio 3. La buena conducta es la que agrada a los otros o les proporciona ayuda 
siendo así aprobada. La conducta empieza a ser valorada por sus intenciones.
 La orientación de concordancia interpersonal de “buen chico - buena chica”. El 
buen comportamiento es aquel que complace y ayuda a los otros y recibe su aprobación. 
Hay  una  gran  conformidad  con  las  imágenes  estereotipadas  en  relación  con  el 
comportamiento mayoritario o “natural”. Frecuentemente se juzga el comportamiento 
en virtud de la intención. “Tiene buena intención" es algo que, por primera vez, tiene 
importancia. Uno gana la aprobación siendo “agradable”.
Estadio 4. La conducta recta consiste en cumplir con el deber, mostrar respeto a la 
autoridad y acatar el orden social.
Hay una orientación hacia la autoridad las normas fijas y el mantenimiento del 
orden social. El comportamiento justo consiste en cumplir con el deber propio, mostrar 
respeto por la autoridad y mantener el orden social dado porque es valioso en sí mismo.
NIVEL 3. POSTCONVENCIONAL
Los principios y valores morales se conciben independientemente de los grupos 
sociales que los profesan.
Este nivel también es denominado autónomo o de principios. En él, hay un 
esfuerzo claro por definir los valores y los principios morales, que tienen validez y 
aplicación con independencia de la autoridad que los grupos o personas que mantienen 
tales principios y con independencia de la identificación del individuo con tales grupos. 
Este nivel también tiene dos estadios:
Estadio 5. Lo preside una concepción contractual, con un cierto tono utilitario. La 
acción recta es la que se ajusta a los derechos generales de los individuos consensuados 
por la sociedad. Es posible cambiar la ley.
La  orientación  legalista,  socio  contractualista,  generalmente  con  rasgos 
utilitarios.  La  acción  justa  tiende  a  definirse  en  función  de  derechos  generales  e 
individuales y de pautas que se han examinado críticamente y aceptado por toda la 
sociedad. Existe una conciencia clara del relativismo de los valores y las opiniones 
personales y se da la importancia correspondiente a las normas procedimentales como 
medio  para  alcanzar  el  consenso.  Aparte  de  los  acuerdos  constitucionales  y 
democráticos, lo justo es un asunto de “valores” y “opiniones” personales. El resultado 
es una importancia mayor concedida al “punto de vista legal”, subrayando la posibilidad 
de cambiar la ley en función de consideraciones racionales de utilidad social (antes que 
congelarla como se hace en el estadio 4 de “ley y orden”). Fuera del ámbito de lo 
jurídico, el acuerdo libre y el contrato son los elementos vinculantes de la obligación. 
Esta es la “moralidad” oficial del Estado y la Constitución (española).
Estadio 6. La ética universal. Lo recto es una decisión tomada en conciencia por cada 
persona de acuerdo con unos principios de justicia, reciprocidad, igualdad de derechos, 
respeto a la dignidad de la persona, etc.
La  orientación  de  principios  éticos  universales.  Lo  justo  se  define  por  una 
decisión de la conciencia de acuerdo con principios éticos que ella misma ha elegido y 
que pretenden tener un carácter de amplitud, universalidad y consistencia lógicas. Estos 
principios son abstractos y éticos (la regla de oro, el imperativo categórico), no son 
normas  morales  concretas,  como  los  Diez  Mandamientos.  En  esencia,  éstos  son 
principios universales de justicia, reciprocidad e igualdad de los derechos humanos y de 
respeto por la dignidad de los seres humanos como individuos.

Teoria psicosexual de Sigmund Freud

ETAPAS PSICOSEXUALES
Freud afirmaba que los tres componentes de la personalidad se iban configurando con las primeras experiencias de la infancia, a medida que la persona atravesaba por una serie de etapas psicosexuales. Desarrollo también es en Freud, evolución en la experiencia sexual como experiencia relacional global, no simplemente genital, auncuando esta es la fundante. Durante estas etapas la energía del Ello se fija en determinadas zonas corporales: la boca, el ano, los genitales. Si en cualquiera de las etapas, se mima en demasía a los niños, o se les priva de afecto, el desarrollo se detiene en esa etapa y la personalidad adulta queda estancada allí donde la dificultad se fijó. Según Freud, la personalidad del adulto queda configurada primordialmente durante estas cuatro etapas:

Etapa oral: Durante esta etapa, que abarca aproximadamente los primeros 18 meses de vida, el niño fija principalmente su conducta en la boca: al comer, chupar y morder. Los niños súpermimados o frustrados en esta etapa, al llegar a adultos, pueden presentar rasgos de la personalidad oral: dependencia, pasividad y avidez.

Etapa anal: A lo largo del segundo año empieza el entrenamiento de esfínteres o el aprendizaje de “ir al baño”: los niños deben aprender a controlar por primera vez, sus impulsos naturales. Este hecho marca el inicio de la etapa anal. Si este entrenamiento es bastante severo y conflictivo, o si la eliminación de las heces fecales y orina es demasiado placentera, el individuo puede quedar fijado en la etapa anal, y posteriormente presentará una personalidad “anal”: desconfianza, terquedad, desorden y sadismo, o excesiva docilidad, excesivo orden y limpieza, demasiados escrúpulos.

Etapa fálica: En la etapa fálica (del tercero al quinto año de la vida) los niños descubren los genitales y se recrean en ellos. Sus fantasías se orientan en torno a los complejos de Edipo y de Electra (nombres de los personajes de la literatura griega que amaban en exceso al progenitor del sexo contrario y sentían gran rivalidad hacia el progenitor del mismo sexo). Freud creía que la resolución de estos complejos era fundamental para el desarrollo de la moralidad y la conducta apropiada a su papel sexual. Si no se resuelven adecuadamente, la persona puede rechazar el papel sexual socialmente sancionado y tornarse homosexual o lesbiana, o bien presentar conducta antisocial, perversa o inmoral.

Etapa genital: Al terminar la etapa fálica, Freud pensaba que ya estaba esencialmente formada la personalidad de los niños. Para él, lo siguientes siete años de vida no constituyen una etapa de grandes necesidades, ni cambios fundamentales en la personalidad. Al presentarse la pubertad, vuelven a presentarse los intereses sexuales como una renovación de la propia percepción corporal dado que el desarrollo hormonal ha favorecido la diferenciación de los rasgos de feminidad y virilidad. Durante la adolescencia y los primeros años de la vida adulta, que en términos generales coinciden con el período genital o etapa genital, los individuos se orientan hacia las relaciones interpersonales y empiezan a participar en las actividades de su cultura. Hasta este período han estado absortos en sus propios cuerpos y en la satisfacción de sus necesidades. En esta etapa nueva, como adolescentes, aprenden a establecer relaciones satisfactorias con las demás personas. Según Freud, una relación heterosexual madura es el punto que marca el comienzo de la madurez.

Linea del tiempo del desarrollo humano

La psicología del desarrollo es una rama de la psicología que estudia los cambios conductuales y psicológicos de las personas, durante el periodo que se extiende desde su concepción hasta su muerte, y en todo tipo de ambientes, tratando de describirlos y explicarlos en relación con el propio sujeto, así como en relación con las diferencias que existen entre ellos; a fin de poder llegar a predecir los comportamientos y, como dirían los teóricos del ciclo vital, "optimizar el desarrollo".

Factores que influyen en el desarrollo humano positiva o negativamente:

Factores que influyen en el desarrollo humano positiva o negativamente:

  1. Pobreza - negativo
  2. Ser un bebé no deseado - negativo
  3. Buena alimentación - positivo
  4. Adicciones - negativo
  5. Familia disfuncional - negativo
  6. Buen sueño nocturno y siesta - positivo
  7. Seguridad y protección de parte de la familia - positivo
  8. Una buena educación - positivo
  9. Enfermedades - negativo
  10. Violencia - negativo
  11. Abusos sexuales - negativo
  12. Problemas sociales - negativo
  13. Herencia genética - positivo o negativo
  14. El medio ambiente donde creció - positivo o negativo
  15. Falta de atención por parte de los padres - negativo
  16. Falta de alguno de los padres - negativo
  17. Depresión - negativo
  18. Aprender a socializar - positivo
  19. Problemas familiares - negativo
  20. Una buena comunicación - positivo

Desarrollo de la personalidad en la etapa de los 6 a los 12 años





CONCEPTOS BÁSICOS DEL DESARROLLO HUMANO

Factores de influencia:

El desarrollo humano, se refiere al proceso mediante el cual se extienden las oportunidades de crecimiento del ser humano; para hacerlo, se requiere crear un entorno para que hagan realidad sus metas y logre vivir de forma productiva.La herencia y el ambiente interactúan continuamente para influir en el desarrollo. Desde el punto de vista de la psicología la herencia se refiere a las características físicas que los padres trasmiten a los hijos mediante los genes, la herencia también es responsable de la conducta del individuo mediante la repercusión que se tienen en las estructuras corporales como el sistema nervioso. Según Donald Hebb el ambiente abarca varias influencias: el ambiente químico, químico postnatal experiencias sensoriales constantes, experiencias sensoriales variables, eventos físicos traumáticos.

1. El ambiente químico: es el que actúa antes del parto, como son los fármacos, nutrición y hormonas

2. El químico postnatal: son las que actúan después del nacimiento, como oxígeno y nutrición.

3. Las experiencias sensoriales constantes: son todos aquellos sucesos que los órganos de los sentidos procesan antes y después del nacimiento.

4. Las experiencias sensoriales variables: son todos aquellos eventos que proporcionan experiencias a los órganos de los sentidos y a los procesos cognitivos.

5. Los eventos físicos traumáticos: son las experiencias que ocasionan la destrucción de células antes o después del nacimiento.

Las condiciones del ambiente y la herencia pueden modificar al individuo, juntos, conforman el desarrollo a medida que los infantes se adentran en la niñez y a la edad adulta.

Los factores psicológicos se relacionan con factores perceptuales, cognitivos, emocionales y de la personalidad que también influyen en el desarrollo. Los factores socioculturales se refieren a las relaciones interpersonales, sociales y culturales; es importante la cultura y el contexto social en donde el individuo se desenvuelve, debido a que estos factores van a permitirle actuar de manera eficaz y con independencia en su entorno, permitiéndole aprender a pensar a solas o con ayuda de alguien más, creando así un estado mental de funcionamiento superior cuando interacciona con su medio y otras personas.